No hay escapatoria
Tengo que admitirlo, el roguelike es uno de mis géneros de videojuegos favoritos, no solo porque tienen multitud de posibilidades, casi infinitas, en cada partida, sino que siempre que tienes un rato muerto te puedes echar una partida, el problema quizás, es echarte solo una, siempre que el juego esté bien planteado. Hace unos años hubo un boom del género y sacabas títulos hasta de debajo de las piedras, algunos siempre serán más recordados como el gran exponente: The Binding of Isaac y la gloria de referencias de Enter the Gungeon y otros, para mí, cayeron un poco en el olvido como el ultra complicado FTL o la locura pirata de Flinthook. Pero uno de los que había oído hablar más, y no entendí a que venía todo el revuelo hasta que por fin lo probé, fue, sin duda, Hades.
Hades, desarrollado por Supergiant Games, es un Roguelite ambientado en Grecia en el que llevamos a Zagreo, el hijo de Hades, dios del Inframundo, en su misión para escapar del Inframundo y ver el mundo exterior. Para eso, saldremos de la Morada de Hades, que hará como nuestro HUB (ahora hablamos de todo lo que hay aquí dentro) y subiremos por distintas zonas del Inframundo luchando contra las hordas de seres infernales que nuestro querido padre envíe para detenernos. En cada zona nos veremos en el típico escenario de Roguelite-like, una sala repleta de enemigos, tras matarlos recogeremos una recompensa y escogeremos (o no) la siguiente sala que atravesar, así hasta llegar a un boss, habiendo también por el camino tiendas regentadas por nuestro buen amigo Caronte, el barquero estigio, que ofrecerá una gran cantidad de objetos, a los que ahora llegamos.
Afortunadamente, este viaje no lo haremos solos, tendremos ayuda de los parientes lejanos de Hades (y de Zagreo, claro), los dioses del olimpo, que han escuchado de la ardua misión del príncipe del Inframundo y se unirán para ayudarle otorgándole distintas bendiciones. Cada dios se especializa en un tipo de bendiciones. Por ejemplo: Zeus, dios del cielo, nos dará bendiciones que añade relámpagos a nuestros ataques mientras que su hermano Poseidón, dios de los mares, nos dará empuje en sus bendiciones. Pero volvamos a la Morada, por aquí hay bastantes cosas de las que hablar.
Después de acabar una run apareceremos a la orilla del río Estigia, en la Morada. Nada más entrar nos encontraremos con Hipnos, dios del sueño y el que se encarga de llevar el registro de todos los fallecidos que llegan a Hades. Tras morir, Hipnos nos recordará que nos han matado y nos dará un gran consejo al respecto. Por ejemplo, si mueres por una trampa de pinchos, nos recomendará no quedarnos parados encima de una trampa de pinchos. Si seguimos el pasillo tendremos de frente la, amenazadoramente enorme, mesa de trabajo de Hades, donde hace… papeleo. Si, este inframundo se rige por burocracia pura y dura. Vamos, que el infierno ahí es como la administración publica aquí, bueno, ahora que lo pienso, es lo mismo.
A la izquierda de Hades tenemos a Cerbero, nuestra mascota, que podremos acariciar y hablar con él a veces al entrar en la Morada. Por el pasillo de la izquierda tenemos la cámara de administración, como su propio nombre indica, se dedica a administrar los intentos de huida de todas las sombras del inframundo, incluido nosotros. Sin embargo, tenemos el acceso restringido al principio, debido a que Zagreo falló miserablemente como trabajador del comité administrativo, al lado derecho de la puerta puede que esté, ya que algunos NPC’s desaparecerán conforme la historia avance en nuestros intentos de huida, Aquiles, el gran héroe griego, que nos dará ánimos y algunos consejos de combate, así como un objeto que nos será bastante útil, pero más adelante. A la izquierda de la puerta de la cámara administrativa hay un pequeño balcón en el que puede aparecer a veces Tanatos, dios de la muerte pacifica, que nos hablará un poco de todo lo que ocurre en la Morada.
Volviendo a la mesa de Hades, a la derecha tendremos al contratista, una amable sombra que nos ofrecerá sus servicios, creando mejoras como fuentes de vida en los distintos niveles para poder curarnos o la aparición de urnas doradas que nos otorgarán dinero en las salas. Además de esto, también tendrá multitud de mejoras estéticas para la Morada. Luego cuando lleguemos a todos los coleccionables veremos que utilizaremos para pagarle a este pequeño timador. A la derecha del Contratista puede estar Nicte (o Nix/Nox, como prefieras llamarla. La mitología y sus muchos nombres), la diosa de la noche y madre de los hermanos Tanatos e Hipnos así como de las Moiras, que guían el destino y un par de dioses más. Nicte, además, es la madre de Zagreo, nos hablará un poco de la familia y las relaciones entre ellos así como de los olímpicos.
Frente a Nicte tenemos la cantina, estará cerrada al principio porque el pobre Cerbero la puso patas arriba en un arrebato tras nuestra última escapada, pero el Contratista nos dejará arreglarla para acceder a ella más adelante. En la cantina podemos ver a algunos personajes conversando en otro entorno más ameno y donde también estará situado el cambista miserable, que nos ofrecerá intercambios de recursos permanentes, más algunas ofertas especiales tras cada run. Tras Nicte está nuestro cuarto, lo más importante aquí es El Espejo de la Noche. El Espejo es un regalo que nos ha hecho Nicte, en este espejo podremos intercambiar Oscuridad (ahora llegaremos a los recursos) a cambio de distintas mejoras, como hacer más daño con mucha vida o hacer más daño por la espalda a los enemigos. Además, en el escritorio, tras comprársela al Contratista, aparecerá la Lista de Augurios Menores, una lista de predicciones de las Moiras sobre Zag, que actuarán como misiones con recompensas tras llegar a ciertos objetivos.
Tras nuestra habitación solo nos queda una zona que ver, el patio. En el patio estarán las armas infernales que utilizaremos para ejecutar nuestra huida, solo tendremos una para empezar, la Espada Estigia, aunque podremos desbloquear más usando llaves ctónicas (lo dicho, ahora llego a los recursos), todas las armas cuentan con cuatro ataques, un ataque estándar, uno especial, un arrojadizo (común a todas) y un acelerado que se ejecuta usando un ataque estándar tras un dash. En la izquierda, está el cambiador, aquí podremos elegir un recuerdo, los recuerdos son objetos que nos entregarán los NPC’s tras hacerle entrega de néctar por primera vez y que nos proporcionaran bonificaciones pasivas como más vida o mejores bendiciones. En el centro del patio estará el último NPC del que hablaremos, Huesitos, un amable y jovial esqueleto contratado para ser nuestro saco de boxeo, con el que podremos practicar combos de armas además de escuchar algunos consejos de combate.
Ahora, recuperemos ese tema de los recursos, que son variados y todos tienen usos. Veámoslos uno a uno:
- Las Gemas: Se utilizan para pagar al Contratista en multitud de sus mejoras, tanto útiles como estéticas y para algunos tratos del Cambista miserable. Las podremos obtener como recompensa al terminar salas, en la lista de Augurios menores, con algunas bendiciones, en cofres infernales, comprándoselas a Caronte y en algunos tratos del Cambista.
- Llaves Ctonicas: Se utilizan para desbloquear las armas infernales en el patio y para desbloquear mejoras en el Espejo de la Noche así como en ciertos intercambios del Cambista. Las podremos obtener como recompensa al terminar salas, en la lista de augurios menores y con ciertos tratos del Cambista.
- Oscuridad: Se utiliza para mejorar las habilidades de Zagreo en el Espejo de la Noche. Se obtienen como recompensa en salas, en cofres infernales, de algunas bendiciones, en la lista de augurios menores, comprándoselas a Caronte y al vencer un boss más de una vez.
- Néctar: Se utiliza para mejorar nuestra relación con los habitantes de la morada así como con los dioses olímpicos. Lo obtendremos como recompensa en salas, bendiciones, la lista de augurios menores y tratos del cambista.
- Sangre de Titán: Se utiliza para hacer unas cosas especiales con las armas y en tratos del cambista. La obtendremos al derrotar a ciertos bosses por primera vez, en la lista de augurios y en tratos del cambista.
- Diamantes: Se utilizan para mejoras del Contratista de la morada y para tratos del cambista. Se obtienen al derrotar ciertos bosses por primera vez, en la lista de augurios y en tratos del cambista.
- Ambrosía: Se utiliza para mejorar al máximo la relación con un NPC tras haberle hecho un favor y dado cierta cantidad de Néctar, así como para algunos tratos del cambista. Se consigue al derrotar ciertos bosses por primera vez, en la lista de augurios y algunos tratos del cambista.
Además de esto, dentro de las runs podremos encontrar otro tipo de recursos que nos ayudarán a atravesar el inframundo de manera más placentera. A saber:
- Corazones de Centauro: Los corazones de centauro nos darán +25 de vida máxima adicional en esa run. Los podremos conseguir como recompensa en una sala o comprándoselas a Caronte en sus tiendas.
- Óbolos de Caronte: Nos darán 100 de oro, que podremos utilizar para comprar cosas en la tienda de Caronte o en el Pozo de Caronte, una mini tienda que aparecerá aleatoriamente en algunas salas y que nos otorgará mejoras temporales o de poder reducido. Las podremos obtener como recompensa en salas, algunas bendiciones y al purgar bendiciones en el Pozo de Purga, que elimina bendiciones a cambio de oro. Una vez acabe la run, perderemos todos nuestros óbolos, así que mejor gastarlos si nos vemos en apuros.
- Martillo de Dédalo: Nos otorga una elección para una mejora del arma equipada. Puedes obtenerlo como recompensa en salas o comprándoselo a Caronte, solo puedes obtener dos en cada run, así que elige sabiamente.
- Granadas de Poder: Nos deja subir de nivel una bendición equipada, aumentando su poder. En el caso de que no tengamos alguna bendición o que no puedan ser subidas de nivel, nos darán 115 óbolos. Se pueden obtener como recompensa en algunas salas o comprárselas a Caronte,
Y eso sería todo lo importante, sin duda, me he reservado algunos secretillos que tendrás que descubrir al jugar. Ahora quiero pasar a la parte más importante y mejor hecha de todo el juego: la historia. Normalmente, los Roguelike tienen una historia muy vaga, casi sin final o con un final inconcluso, Hades no es así, está repleto de diálogos, todos los NPC’s tendrán algo que decirnos al volver al Hogar, ya sea para decirnos algo sobre ellos, darnos la enhorabuena por los progresos o simplemente darnos un resumen de lo que ha ocurrido en la morada en nuestra ausencia. Además, interactuarán con nuestras decisiones en las runs, por ejemplo, los olímpicos verán con buenos ojos que portemos sus recuerdos al recibir una bendición suya, pero comentarán algo si tenemos una bendición de uno de sus hermanos o sobrinos/primos. Hipnos como ya dije anteriormente nos dirá como hemos muerto y nos otorgará algún consejo, si es posible, y Nicte se preocupará por nosotros cada vez que seamos aniquilados. Aunque no tenemos opciones de diálogo, el mundo se nota vivo y la historia avanza con nosotros mientras vamos ganando runs u obteniendo variedad de recursos y objetos de gran utilidad.
Si algo malo le puedo sacar al título, y así va a ser, aquí tengo que confesar que me he tenido que forzar a sacarle algo; es que las mejoras del espejo de la noche, así como algunas del contratista son demasiado caras para lo que ofrecen en algunos casos, y debido a que algunos recursos se obtienen como recompensa aleatoria en salas, toma bastante tiempo farmearlos. Pero vamos, que es una nimiedad y los vas a farmear sin darte cuenta simplemente por jugar e ir pasando runs y, si te falta de algo, seguramente puedas intercambiar con el cambista algo que tengas de sobra para obtener ese recurso escurridizo.
En general, Hades es un juego excelente y uno que para mí revolucionó en gran medida un género que ya se creía, por lo menos, en mis ojos, demasiado sobreexplotado y sin nada nuevo que ofrecer. Tiene un combate muy fluido y personalizable, multitud de opciones de combate y mejora y, algo que no he comentado aún, un postgame extremadamente interesante. El juego te lo justifica de muy buena manera porque tras hacer nuestra primera run exitosa, es decir, haber escapado del inframundo; tendríamos que repetir la hazaña. Además, nos da una dificultad adicional, nombrada El Pacto del Castigo, que añadirá nuevos desafíos y maneras distintas de superar los peligros del inframundo en nuevas runs, todo completamente personalizable antes de comenzar una nueva expedición.
Y aún no he mencionado lo más importante, el diseño sonoro y visual. Solo hay que ver un par de capturas para ver que el mundo de Hades es bellísimo, cada personaje, decoración, enemigo, ataque, todo tiene su belleza, como el imponente trono de Hades: frente a su enorme mesa, los paisajes del Tártaro y demás zonas del inframundo. Hasta los retratos de los personajes cuando hablas con ellos están llenos de detalles y cariño que los hacen obras de arte en sí misma. Y los sonidos y la banda sonora, otro sector del título que es increíble, todo tiene su sonido, desde las sombras pululando por la casa al ajetreo de la cantina pasando por los sonidos de los contundentes ataques de nuestras armas en los que podremos notar la fuerza de cada impacto. Y, como no, las voces de los personajes, todos los NPC’S tienen doblaje en ingles, pero todos los textos están en español y las voces rebosan personalidad y carisma desde la seriedad y estoicismo de Hades a la jovialidad y serenidad que transmite Dionisio.
Así que, si te gusta mínimamente el género de los roguelike-roguelite, deberías de probar Hades, es una brisa de aire fresco a un género que, desgraciadamente, no innova tanto como me gustaría, ya sea por miedo o por mantenerse tradicional. Y si no has probado nunca ningún juego del género, me tragaré mi orgullo de fan incondicional de The Binding of Isaac y te recomendaría que entrases por Hades, es un exponente de todo lo bueno que hace un roguelike-lite divertido. Tienes mucha personalización en cada run, son bastante rápidas, si no te entretienes mucho en 20-25 minutos terminas una al 100% y te dan ganas de empezar otra y otra y otra… Yo personalmente empecé este análisis antes de pasarme al boss final por primera vez, y lo pausé porque quería hablar también del postgame en el caso de que hubiera. Ahora mismo he ganado 5 veces y no pienso parar en mucho tiempo, sigo descubriendo cosas nuevas y avanzando en las relaciones y eso hace a Hades brillar con luz propia, no hay caminos secundarios, no hay distintos finales, siempre es el mismo camino. Y aun así, cada run es única y especial ya sea por tus decisiones o por una nueva información que has descubierto en el diálogo de un NPC, portando cierto objeto o habiendo escogido ciertas bendiciones. Sin más que decir, que me he explayado demasiado, pertréchate con tu mejor arma, coge un recuerdo preciado e intenta escapar del inframundo.