La entropía se puede definir como el desorden, o la falta de orden en un sistema. Todos los sistemas y cuerpos inorgánicos tienden a la entropía. Así, con el paso del tiempo, los cuerpos en el espacio se separan entre sí, las estructuras se derrumban; e incluso los seres vivos cuando mueren ceden a la entropía. La entropía es el destino del universo. Sin duda, un concepto muy interesante, de la misma manera que The Entropy Centre, un juego de puzles en primera persona, desarrollado por Stubby Games y distribuido por Playstack, es un juego más que interesante.
A simple vista, se nota la clara influencia de Portal en el título. Salas de puzles cerradas con una pistola que nos ayude en su resolución, e incluso tener una inteligencia artificial que nos hable durante el juego. Pero no se queda en un homenaje a Portal. The Entropy Centre consigue sacar a relucir su originalidad para dar lugar a un juego más que interesante.
Este cubo me recuerda a un puzle
Un aspecto destacable del juego es su historia y ambientación. Si bien intentaré hablar sobre la historia del juego sin dar muchos spoilers, sí que comentaré alguno para hablar bien sobre esta. Si prefieres no saber nada sobre la historia, pasa a la siguiente sección del análisis.
Nos despertamos en un cuarto desordenado dentro de lo que parecen unas instalaciones abandonadas. Sin saber dónde estamos ni qué hacemos allí, exploramos por la zona, donde encontramos una curiosa arma. Para colmo, esta arma habla y nos incita a ir a las distintas salas de puzles de la instalación a resolverlos para crear energía entrópica. Es aquí donde entra la parte de la entropía. Nos encontramos en el Centro de Entropía, un lugar que reúne esta energía mediante puzles para «crear un mejor mañana».
Para poder resolver estos puzles, necesitamos utilizar nuestra arma, un dispositivo entrópico capaz de rebobinar objetos por un periodo corto de tiempo. Puede parecer difícil de explicar, pero se trata simplemente de un dispositivo que hace retroceder objetos en el tiempo. Esto, ciertamente, es el mayor atractivo del juego y el núcleo de todos sus puzles.
Volviendo a la historia, si bien no es la más compleja o innovadora de la industria, resulta bastante entretenida, y la forma en la que se nos presenta, nos incita a sacar tus propias conclusiones sobre lo que pudo haber ocurrido o sobre lo que está ocurriendo en este momento; cosa que considero muy positiva.
Cerebro grande momento
El aspecto principal de The Entropy Centre son los puzles. Dentro de las instalaciones hay muchas salas de puzles que tendrás que resolver para continuar. Aunque esto parece artificial, está muy bien integrado dentro del mundo y los puzles son realmente interesantes y variados. Desde cubos que son necesarios para activar botones que abran puertas, los puzles se van complicando y van añadiendo nuevos elementos, como cubos trampolín, lanzaderas, cubos láser, cintas transportadoras o puentes.
De esta manera, nunca se siente repetitivo, pues estos elementos interactúan entre sí de maneras muy interesantes. Además, estos puzles tampoco se sienten demasiado complicados. Si no que se basan más en la novedad e interactividad de los elementos para dar puzles más desafiantes. Como detalle muy interesante, al final de cada puzle pasarás por un pequeño pasillo donde podrás ver el tiempo que has tardado en completar ese puzle. Un añadido muy bien integrado y agradecido.
Muchos puzles tienen también pequeños secretos a los que puedes acceder con un poco de exploración. Y aunque hay algunos de estos secretos en las zonas entre puzles, el juego es bastante lineal.
Un descanso de tanto pensar
Para que el hecho de completar un puzle tras otro no se sienta una tarea tan repetitiva, The Entropy Centre nos pone de vez en cuando en situaciones distintas entre los puzles. Puede ser una sección de plataformeo o una fase de acción contrarreloj, o una sala de combate. Porque sí, aunque no lo parezca, hay momentos donde debemos enfrentarnos a unos robots que nos atacarán en cuanto nos vean. Aunque también pueden, simplemente, ser zonas más amplias de exploración.
Aun así, para todas estas secciones, necesitamos utilizar nuestro dispositivo entrópico de una forma u otra. Ya sea devolver los proyectiles que nos lanzan (algo muy chulo, si se me permite el término) o para rebobinar estructuras derruidas y emplearlas como camino. El otro añadido destacable son los mensajes de correo que podremos leer en algunos ordenadores. Estos pequeños fragmentos de lore del juego actúan como coleccionables, pero también son muy útiles para comprender lo qué sucedió en la historia del juego o ver detalles interesantes o graciosos sobre esta.
¿El fin?
Ciertamente, The Entropy Centre es muy interesante en muchos de sus aspectos. Los puzles son originales e innovadores con las mecánicas que introducen. Aunque el plataformeo o el combate no estén tan pulidos como quisiera, son lo bastante sencillos para no representar un problema. De igual manera, hay puntos de control después de cada puzle, por lo que incluso en el caso de quedar atrapado en algún punto sin poder moverte o tener algún problema, la perdida de progreso es mínima. Aunque, siendo sinceros, fallos no encontré durante la partida.
Para un total de 15 capítulos, y alrededor de unas 9 horas para completarlo, The Entropy Centre es una experiencia sólida, divertida que te llama la atención por su parecido a Portal y la pistola que habla, y te atrapa con su mundo, historia y diseño de puzles más que decente. Sin embargo, no todo es positivo. Aunque sea evidente, no es un juego que ofrezca mucha rejugabilidad. Una vez conoces los puzles, el misterio se acaba, y no hay más razones para volver a completarlo más que por conseguir todos los coleccionables, o querer volver a vivir la experiencia (que es totalmente válido).
Otro aspecto negativo que me gustaría destacar es cómo deja muchos frentes inexplorados. Si bien la historia cubre muchos aspectos del mundo del juego, otros se dejan totalmente apartados tras introducirlos y no se le acaba dando explicación alguna, como a la posible autonomía de las inteligencias artificiales.
Pero con todo eso, The Entropy Centre es un muy buen juego. Muy disfrutable y un título indispensable de los fans de los puzles y los ordenadores que cuentan chistes malos. Puedes comprar The Entropy Centre en Steam aquí.