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Análisis de Boti: Byteland Overclocked

Un simpático plataformas 3D que hará las delicias de los fans del género

Es difícil encontrar títulos del género de las plataformas 3D hoy en día, si bien Nintendo y Super Mario nunca fallan a la cita, el resto de compañías no parecen muy animadas a sacar juegos del género. Sí que hay algunas excepciones como PlayStation y su genial Astro Bot, o incluso los irregulares juegos de Bob Esponja. Esta vez la compañía indie Purple Ray Studio es la que nos trae un simpático juego protagonizado por un robot y que hará las delicias de los amantes del género de las plataformas.

El interior de un ordenador es el curioso escenario de este Boti: Byteland Overclocked

Comenzando con la historia del juego, pues está un poco por estar, al igual que otros grandes del género, la historia solo es un pequeño hilo conductor de los niveles, pero que apenas aporta nada. En este caso somos Boti, una especie de robot que se encarga de arreglar fallos en el hardware de un ordenador.

Porque sí, todo el juego está ambientado en el interior de un PC, recorreremos la placa base, estaremos en contacto con la CPU, veremos las memorias RAM, incluso uno de los objetivos del juego será encontrar a Kernel. Aunque creo importante comentar que, aunque es un juego que puede ser jugado por los más peques de la casa, a veces usa expresiones o lenguaje bastante técnico en lo que respecta al mundo de los ordenadores, algo que puede echar para atrás a muchos compradores.

La estructura del juego es la típica del género: Boti: Byteland Overclocked consta de un hub central desde donde podremos entrar a los diferentes niveles, 8 en total. En cada nivel tendremos una serie de plataformas que completar para llegar al final y aparte tiene el toque de exploración, ya que hay bastante coleccionables, como lo son diferentes trajes para Boti, unas monedas especiales, trozos de grabadoras donde se nos contará algo más sobre el lore del juego… Se hace bastante divertido ir encontrando todos estos coleccionables y hay que destacar que algunos de ellos estaban muy escondidos.

Mecánicamente, no inventa la rueda, pero el control ágil y la variedad de situaciones hacen que no se sienta repetitivo

Mecánicamente, el juego es tremendamente parecido a otros del género, dobles saltos, planeo, algunas mecánicas de combate muy simples que solo constan de aporrear un botón… Si bien es verdad que el juego fase a fase va metiendo alguna que otra mecánica nueva, por ejemplo tenemos una especie de imán que emplearemos para mover distintos objetos o también aparece de vez en cuando un vehículo para fases más al estilo de la saga Crash Bandicoot. La verdad es que, en general, la experiencia de juego cumple con creces y no resultara repetitiva en ningún momento. La duración del juego rondará las 6 horas, sumándole unas horas más si queremos explorar al 100% todos los niveles, una duración que se hace algo justa para el género.

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Ya metiéndonos en lo técnico, mi primera experiencia con Boti ya os voy adelantando que no fue buena, el juego funcionaba mal, el rendimiento era nefasto, bugs por todas partes, incluso ni siquiera era posible terminar la aventura. Pero parche tras parche, el equipo tras el juego ha logrado que mi opinión cambie por completo. Tras todas estas actualizaciones, el pequeño juego de plataformas logra mantener el tipo con una buena tasa de FPS, han resuelto gran parte de los fallos y bugs graves, incluso han mejorado algunas mecánicas y animaciones que en un principio no llegaban a funcionar del todo bien. Además, se incluyeron textos en español, se arreglaron los menús y se añadieron todos los logros.

Artísticamente, es muy bonito con un uso de la luz y un diseño de personajes que dan la talla

El resultado es un juego que técnicamente pasa el corte, ya que fuera de la parte de rendimiento, el juego es gráficamente y artísticamente muy bonito, con un buen diseño de los personajes, un buen uso de la iluminación, aunque sí que es verdad que abusa mucho de los efectos de neón. La nota negativa la dan los fondos, que difieren mucho de la calidad de los elementos puesto en primer plano, aunque también hay que decir que es un defecto que cometen muchos juegos de este género.

En tema de sonido no hay casi nada que destacar, melodías repetitivas, pero que cumplen su función, voces en inglés que ni bien ni mal y efectos que simplemente cumplen. Cabe repetir que casi todos los textos y menús están en castellano.

Conclusión final

En conclusión, Boti nos presenta un plataformas 3D clásico muy sencillito, pero a la vez muy agradable de jugar. Con un apartado artístico decente y unas mecánicas lo suficientemente divertidas como para motivarnos a acabar el juego, Dicho esto, no está exento de fallos, aún mantiene algunos bugs molestos, aparte la duración se hace algo escasa y algunas decisiones en la historia se me hacen, por decir algo, extrañas. Aun así, si eres fan del género y tienes un PC, sin duda le daría una oportunidad.

Alejandro Treceño

Redactor en HelGames. Apasionado a los videojuegos, especialmente a la marca PlayStation.

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