AnálisisDestacados

Análisis de Dungeons & Degenerate Gamblers

La suerte esta echada

Siempre he creído que el medio de los videojuegos es capaz de dotar de una dimensión adicional a medios de entretenimiento más tradicionales como los libros o los juegos de mesa clásicos. Y sin duda, creo que uno de estos tipos de juego que se beneficia en gran manera de las capacidades ilimitadas que propone un videojuego son los juegos de cartas. Creo que no me equivoco al pensar que llevar a un formato de cartas tradicional juegos como Heartstone, Legends of Runeterra o Inscryption es casi imposible, y el juego del que vengo a hablarles hoy, Dungeons & Degenerate Gamblers es un ejemplo más de lo que se puede hacer con un poco de magia entre cartas.

Dungeons & Degenerate Gamblers es un título de cartas roguelike deckbuilder desarrollado por Purple Moss Collectors y publicado por The Yogscast que nos pondrá a jugar al Blackjack en localizaciones bizarras con un arsenal de cartas con multitud de efectos y combos que recuerdan a Balatro. Ya hablé de este juego por encima cuando pobre su demo en el Steam Next Fest y la versión completa solo ha hecho que mejorar mi opinión del titulo de gran manera. En la demo solo se podía jugar la primera zona y con esta nueva versión no solo tenemos un nuevo menú y algunos cambios visuales sutiles, sino acceso a una experiencia completa y mucho mas diversa que lo que ya he probado.

Una partida fuera de lo usual

El juego es de estos que en cuestión de historia te explican poco mas bien nada al comenzar.  Comenzaremos todas las partidas en un bar en el que tendremos que abrirnos paso para buscar al manager, y así obtener una llave de un ascensor para continuar nuestra aventura. Nuestro objetivo no esta del todo claro, solo sabemos que tenemos que ganar partidas de Blackjack contra un elenco de variopintos personajes y continuar avanzando por diferentes estancias buscando algo, pero quizás esta falta de objetivos claros o un propósito, sea aquello que más motive a continuar.

Las mecánicas del juego son sencillas pero a la par complejas. Como bien he comentado anteriormente, el juego se basa en el Blackjack, un juego de cartas en el que hay que robar cartas hasta alcanzar una cifra de puntos lo más cercana 21 sin pasarnos, es un juego de puro azar aunque a veces pueda requerir algo de habilidad y nervios de acero. Sin embargo, esto no es todo lo que tiene el juego. Tendremos a nuestra disposición dos botones; Uno para pedir una carta y otro para «plantarnos«. Cuando tanto nosotros como nuestro oponente nos plantemos se comparan las puntuaciones de ambos, y aquel que haya sacado menos sufre daño equivalente a la diferencia entre ambos. Si alguno de los dos pasa de 21, cuenta como tiene 0 puntos. Es decir, si tu sacas 18 puntos y tu oponente saca 11, el recibirá 7 puntos de daño. El objetivo de cada enfrentamiento es «matar» a nuestro opnente perdiendo la menor cantidad de vida poosible. Empezaremos siempre con 100 puntos de vida y no nos curaremos al terminar los enfrentamientos así que hay que controlar cuidadosamente el daño que recibimos.

La magia de las cartas

Sin embargo, no todo es tan sencillo. En primer lugar, cada carta pertenece a un palo (picas, corazones, tréboles y diamantes), es importante tener en cuenta los palos de nuestras cartas ya que al hacer un Blackjack (es decir, llegar exactamente a 21) obtendremos efectos adicionales dependiendo de los palos de las cartas que hayan contribuido a este. Las cartas de tréboles añaden daño adicional a nuestro ataque, las cartas de diamantes nos otorgan fichas (que es el dinero del juego), las cartas de picas nos otorgan escudo y las cartas de corazones nos curan. Al comienzo del juego solo podremos jugar con un mazo de corazones pero mientras juguemos podremos desbloquear el resto de palos así como el mazo de nada (que no tiene efectos) y el mazo glitch (que tiene cartas con efectos completamente aleatorios)

  Análisis de Mindcop

Pero las cartas clásicas de la baraja no serán las únicas cartas que utilizaremos en este juego, que va, primero, tendremos a nuestra disponiéndoos cartas con valores exorbitados como 13, 11 o incluso, 21. Pero ademas de esto también habrán cartas que hacen referencias a otros juegos, series, películas o conceptos, como la carta Charred Lizard, que es una carta Pokemon de Charizard, el Mago Oscuro de YugiOh o Gerald de Riviera. Todas estas cartas pueden tener múltiples efectos que son capaces de cambiar las tornas de la partida en un momento.

La baraja a nuestro favor.

A lo largo de nuestra aventuras podremos encontrar eventos como tiendas para comprar nuevas cartas, destruir algunas que no nos interesen, intercambiar cartas, curarnos y demas cosas interesantes que añaden algo de control a la par que suerte a la aventura. Al terminar una zona podremos hablar con una adivina que nos permitirá escoger una carta del tarot, estas cartas son extremadamente poderosas y tienen efectos en su mayoría demoledores como hacer daño a nuestro oponente si empatamos, ganar escudos si nos pasamos de 21 o quemar todas las cartas básicas que se encuentren en juego o en nuestra mano.

Otra cosa que hay que tener en cuenta son las palabras claves de las cartas, algunas surten efecto al pedir una carta, otra al plantarnos, otras cuando se juegan cartas con números concretos, y otras, tienen lo que se llama un «Exploit«. Los exploits son habilidades activas que cuestan Iniciativa. Tras nuestra primera pelea, el tabernero nos ofrecera una elección entre dos fichas pasivas que serán nuestra fuente de iniciativa principal, como poder comprar 1 de iniciativa por 10 fichas u obtener 1 de iniciativa cada vez que ganemos una ronda. Es esencial controlar nuestra iniciativa y hacer un uso inteligente de los exploits para ganar partidas. Otra de las mecánicas mas curiosas del juego es la de la mano. Hay cartas que al robarse, en lugar de unirse a nuestra pila para sumar puntos, se van a nuestra mano. Las cartas de la mano se pueden jugar en cualquier momento de nuestro turno gastando 1 de iniciativa salvo que sea una carta «Foil» las cuales serán gratis.

Un estilo único

El estilo visual y sonoro de Dungeons & Degenerate Gamblers es bastante interesante, cuenta con un pixel art batante currado tanto en las cartas como el diseño de personajes así como los escenarios, el texto y demás detalles, crean una atmósfera muy atractivo que pasa desde un bar sucio y lleno de borrachos y jugadores de cartas en busca de perder todo su dinero a zonas VIP de locales lujosos donde las apuestas son tal altas como los humos de todo aquel que transita su interior.

Una de las cosas que mas he disfrutado de manera no irónica al jugar este titulo es examinar el arte de las cartas, su nombre y efectos para poder entender las referencias, porque la verdad, es que no son pocas, algunas que puedo revelar de manera rapida a modo de ejemplos pueden ser a la canción Dancing Queen de ABBA o al simple dicho «Jack of All Trades» en versión carta, lo cual hace todo mas interesante y entretenido mientras no intentamos morir.

Conclusion

Dungeons & Degenerate Gamblers es un título roguelike bastante adictiva cuyas partidas pueden ser muy rápidas o algo más largas dependiendo de la estrategia que momentos y cuanto seas capaz de sobrevivir que cuenta con unas mecánicas sencillas y fáciles de entender pero que se expanden a una complejidad inimaginable combinando multitud de efectos pasivos, activos e interacciones con las cartas de nuestros oponentes para obtener la victoria de la manera mas efectiva.

La facilidad que tenemos para crear nuestro propio mazo, consiguiendo cartas tras cada combate, comprándolas, vendiéndolas e intercambiándolas hará que cada partida sea única, buscando nuevas estrategias y aprendiendo de nuestros errores para mejorar y avanzar cada vez más en un ciclo jugable adictivo e interesante. Una experiencia que recomiendo a todo el mundo que le interese los juegos de cartas o los roguelikes.

Adrián Álvarez

Integrador Social y apasionado de los videojuegos, Cofundador y redactor de Helgames y un amante de los Soulslike y Roguelikes.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba