¿Sabéis qué es lo que los ha traído aquí? ¡El honor!
Cuándo pienso en un videojuego en concreto, casi siempre pienso en Assassin’s Creed 2, en el año 2009 Ubisoft Montreal nos trajo un juego para enmarcar en la historia de la compañía, un juego que marcó un antes y un después para la multinacional. En el día de hoy os presento mi análisis de este juego, el nacimiento de Ezio Auditore da Firenze, un joven noble de la Italia Renacentista, nacido en Florencia en el año 1459.
Quiero recordar que este título tiene casi 12 años y que todas las mejoras y novedades de las que hablo en este análisis son respecto a la entrega anterior, Assassin’s Creed, lanzado en 2007.
El tutorial del título dura algo más de una hora con Ezio, al que controlaremos en su adolescencia y con el que aprenderemos la mayor parte de los conceptos jugables que se repiten del primer Assassin’s Creed y los nuevos de esta entrega.
Sin entrar en grandes spoilers, su familia es traicionada aunque no hablaremos sobre los motivos o el modo en que estos caen en desgracia. Lo que sí revelaremos es que el padre del protagonista es un asesino y que dejará en herencia su traje y armas a su hijo, para que inicie una sangrienta y violenta venganza. La verdad que es una gran excusa para visitar las grandes ciudades de la Toscana, además de la impresionante Venecia. Ciudades como Florencia, San Gimignano, la misma Venecia y demás, están hechas con una calidad y una cantidad de detalles realmente impresionantes.
El juego vuelve a contar con dos líneas argumentales diferentes: la de Ezio y la del presente protagonizada por Desmond, el mismo protagonista en el presente que el del primer Assassin’s. Realmente es casi anecdótica la presencia de las secuencias del presente, pero se le da una importancia lo suficientemente relevante como para que sea interesante ver y jugar esos momentos.
Bueno, volvamos al pasado, con Ezio. La duración de la campaña rondará sobre las 19 horas sin contar misiones secundarias y coleccionables, juntándolo todo el juego durará unas 30 horas.
Con la cantidad de conceptos nuevos y recursos que se introducen es muy lógico que el tutorial se fusione con los primeros minutos de historia, vamos, su curva de aprendizaje, en un videojuego de estas dimensiones debe estar bien cuidada, y hasta en eso Assassin’s Creed II es sublime.
Sobre el parkour, se nota una mejoría muy notable respecto a la primera entrega, pero que más de 10 años después se nota realmente anticuado. Si, por ejemplo, estamos sufriendo una lluvia de piedras a cargo de guardias con la intención de derribarnos mientras tratamos de huir de no caer al suelo, ya que dependiendo de la altura nos puede provocar desincronización.
Una novedad también palpable es la capacidad de nadar, ya que incluso podemos huir de nuestros enemigos nadando o si tiramos al mar a los enemigos los matamos porque no saben nadar.
El combate ha mejorado un poco y esto se debe a que se han incorporado varias fórmulas con las que mejorar su mecánica, la primera de ellas debe ser la notable mejora que ha experimentado la IA del enemigo, que utiliza diferentes tipos de soldados que se organizan para atacar, podemos decir que la variedad de enemigos es bastante satisfactoria. Las clases de enemigos son las siguientes: Soldados típicos(armadura y espada), soldados con armaduras grandes y pesadas, enemigos con alabarda (que me daban un poco de asco), los ágiles que van con daga y son rápidos y los míticos arqueros.
También destacar la opción de bloquear golpes por parte de los enemigos, ya que obliga al jugador a estar más concentrado, porque no es tan sencillo. También les podemos agarrar pulsando el círculo en PlayStation o B en Xbox, una vez agarrados el juego permite dar puñetazos y cabezazos hasta dejarlos K.O. sin que pongan resistencia.
El juego también implementa un inventario, ya que tenemos más armas, distracciones y una novedad muy curiosa como son las pociones curativas. Para usar ese inventario en Xbox se debe usar el botón RB y en PlayStation R1. En ese inventario encontramos: Hoja oculta, hoja oculta con veneno, espada larga, espada corta, dinero para distraer, curación, desarmado, cuchillas arrojadizas, bomba de humo y, una que se consigue más adelante que no diré para evitar posibles spoilers (pero es muy top).
Si hablamos de las misiones secundarias notamos también una mejoría absoluta, hay muchas más misiones secundarias y muy variadas entre ellas, palizas por encargo, correo, carreras, Refugios de Templarios, Tumbas de Asesinos, asesinos a sueldo y las míticas Atalayas.
Los florines es la moneda del juego, sirve para mejorar el equipo, reparar la armadura, comprar arte, tintes para la ropa, medicina, veneno, munición… En general, la moneda es pilar fundamental en este juego.
Lo que me pareció más tedioso del juego fue la parte de recoger cofres, plumas y otros coleccionables, es cierto que no es imprescindible hacerlo para pasarte el juego, tener que recoger los más de 500 cofres o las 100 plumas es aburrido. Pero para conseguir todos los logros necesitas conseguir al menos todas las plumas, y no están marcadas en el mapa, lo que significa debes buscarlas por los diferentes mapas.
Cuando llegas a cierto punto de la historia verás que tienes un sistema de reputación, lo cual el juego te brinda varias opciones para bajar tu notoriedad, matar a un testigo, que se queda marcado y en cuanto te vea huirá, romper carteles o sobornar heraldos. Es un sistema bastante curioso y que realmente me gusta. Además del sistema de reputación, el juego ofrece ciertas ayudas como la siguiente, contratar ayudantes, como cortesanas, para distraer a los enemigos, mercenarios, que sirven para atacar a los enemigos y ladrones, para provocar a los enemigos y también distraerlos.
El apartado gráfico, teniendo en cuenta que es un mundo abierto de 2009 con varios escenarios muy amplios y muchos ciudadanos por la calle, me parece excelente. Sobre las físicas del protagonista he de decir que son bastante buenas, ya que parece que estamos usando a una persona y no a un robot, a la hora de luchar, correr o incluso en las cinemáticas, vemos que Ezio es un personaje que se ha trabajado y dedicado con mimo para que sea realmente bueno.
El apartado sonoro es de lo mejor que recuerdo en un videojuego, con un doblaje muy bueno. Sobre la banda sonora, qué decir…es única, épica, majestuosa y bella, cada canción me da una leche de nostalgia y me tira 10 años para atrás, solo con escuchar Ezio’s Theme o Earth se me cae la lagrimilla, simplemente emocionante.
Sobre el renacimiento, me gustaría dejarlo para un artículo dedicado expresamente a ello porque me gustaría explicarme de una forma más amplia, pero en general, también es maravillosa la recreación.
Las conclusiones son las siguientes, en líneas generales me parece una obra maestra, pero se nota que el juego tiene muchos años y se nota anticuado, el combate a pesar de estar bien no puede competir con los juegos de hoy en día, la historia sigue siendo fantástica por no hablar de los personajes y compañeros de la aventura, como Leonardo Da Vinci, que es sublime a la par que los villanos, que son memorables.
Me entristece el rumbo que tiene ahora la saga, abandonando el credo y los mundos que sin ser pequeños no son excesivamente grandes, a algo totalmente diferente. El credo ya ni existe, o casi no le dan importancia. Mundos excesivamente grandes, ya directamente hacen países, que siendo bellos y realmente disfrutables, como en Valhalla, a veces se siente tedioso y repetitivo, como en Odyssey. La saga ahora parece que es un juego de mitología pero con una cuchilla en el brazo, bueno, en Odyssey ni eso.
Ojalá volvamos a tener un protagonista Assassin, con la orden ya establecida y si pudiera ser, puestos a pedir, volviendo a visitar Masyaf, la tierra de los Assassin’s.
Ezio, viva la madre que te parió.