Monster Hunter Rise supuso un cambio de aires para la franquicia. La implementación del cordóptero no solo implicó una renovación total del sistema de movimiento, sino que afectó también a la forma en la que los cazadores afrontaban el combate gracias a los ataques especiales y al cordoamarre. Muchas cosas cambiaron en la franquicia para hacer de Rise la perfecta versión de bolsillo del aclamado Monster Hunter World.
Sin embargo, ese planteamiento de “juego de bolsillo” fue precisamente lo que acabó provocando que los cazadores comenzaran a abandonar el juego a los pocos meses de su lanzamiento. La simplificación en varios sistemas, la carencia total de dificultad en las cacerías, las pobres actualizaciones y, lo más importante, la ausencia de un endgame que diera rejugabilidad al título, acabaron convirtiendo a Monster Hunter Rise en una de las entregas más monótonas y faltas de contenido de toda la saga.
El juego tuvo un lanzamiento y una recepción espectacular y, por ello, os invitamos a leer nuestro análisis de Monster Hunter Rise. Por suerte para los amantes de la caza de monstruos, cada juego de la franquicia sigue un desarrollo similar y a todos los títulos acaban recibiendo una expansión.
Hoy todos los cazadores del viejo mundo nos reunimos en el gremio dispuestos a explorar nuevas fronteras en Monster Hunter Rise: Sunbreak; la expansión de contenido masivo del título lanzado en 2021. ¿Habrá conseguido esta expansión subsanar los principales errores del juego original?
Un nuevo hogar en el viejo mundo
Nuestra aventura en esta expansión comenzará justo donde terminó la historia en Monster Hunter Rise. Nuestro cazador, tras coronarse como el héroe que salvó a la aldea de Kamura, tendrá que hacer frente a una nueva amenaza. Malzeno, un dragón anciano legendario, está volviendo locos a todos los monstruos, obligando a las criaturas a migrar y cambiando la ecología de los territorios y sumiéndolos en el caos. Este hecho obliga a nuestro personaje a abandonar Kamura en pos de eliminar al dragón anciano y recuperar el orden natural.
Para lograr este cometido contaremos con una nueva base de operaciones desde la que podremos organizar las cacerías y equipar a nuestro personaje. Seremos recibidos con honores en Elgado, una base provisional que acoge a los más hábiles cazadores para la incursión contra Malzeno. Esta nueva localización es, en esencia, la típica aldea que encontramos en la saga Monster Hunter y que sirve de nexo para preparar la caza.
En Elgado contaremos con una herrería para crear equipamiento, una cocina para comer antes de la cacería, diversas tiendas para comprar provisiones y una recepcionista encargada de darnos misiones. Si bien Elgado es una localización que simplemente sirve un nexo en el que aceptar las misiones, la verdad es que es un emplazamiento algo soso. Esta nueva base pierde la magia y el misticismo de Kamura y, por desgracia, no cuenta ni con la tradicional sala del gremio presente en prácticamente todas las aldeas de la franquicia.
Junto a Elgado llegan dos nuevas zonas en la que nuestro cazador podrá acechar a sus presas. La primera es La Jungla, un mapa conocido por los veteranos de la saga y que viene directamente de Monster Hunter Dos remodelado para adaptarse a la nueva movilidad. Como segundo coto de caza tenemos al Bastión, un castillo abandonado que fue asediado por Malzeno en el pasado y que ahora sirve de guarida para las bestias más letales de este mundo.
Un gameplay renovado
El cordóptero, la principal mecánica introducida en Monster Hunter Rise, también ha recibido un par de novedades. Durante nuestras cacerías nos toparemos con cordópteros de colores, estos pequeños bichitos tendrán asociado una mejora concreta dependiendo de su color: el rojo nos dará más ataque al montar a un monstruo, el amarillo hará que el monstruo suelte materiales durante la pelea y el verde, originario de Rise, sumará un cordóptero para poder realizar más acciones. La implementación de estos cordópteros no cambia rotundamente el combate, pero es un añadido que se agradece y que otorga algo más de variedad a las misiones.
Por otro lado, en Monster Hunter Rise: Sunbreak se ha añadido mucha más versatilidad al combate gracias a la implementación de nuevos ataques especiales y al cambio activo de los mismos.
Cada arma en Sunbreak cuenta con 3 nuevos ataques de cordobicho. Este hecho no solo da algo más de variedad a las armas, sino que realmente consigue cambiar el estilo de juego de estas. Este cambio también ha servido para realizar ajustes necesarios en armas como la lanza, la espada y escudo o el glaive insecto; unas armas que, hasta el lanzamiento de Sunbreak, no contaban con un set de movimientos eficiente.
La otra gran adición al combate ha sido el cambio activo de habilidades. En esta expansión podremos crear diversos sets combinando movimientos básicos de las armas con sus movimientos especiales. Elegir un movimiento u otro cambia totalmente el uso de un arma en combate, por ejemplo: podemos escoger si queremos restringir nuestro movimiento para realizar más daño o si preferimos dar golpes más rápidos algo menos efectivos.
Pues bien, en Sunbreak no tendremos que limitarnos a un estilo de juego. Gracias el cambio de habilidades podremos cambiar nuestro set de habilidades en mitad de la caza. Este hecho da posibilidades prácticamente infinitas al jugador, puesto que podrá cambiar el estilo de juego de su arma dependiendo de su situación en el combate o al enfrentarse a un nuevo enemigo.
Salimos de caza
En este punto voy a ser bastante claro, las cacerías en Sunbreak son infinitamente más satisfactorias que en el título original. En esta expansión recuperamos algo de la experiencia tradicional de la saga: conocer al objetivo y prepararse para la cacería. Por ende, Monster Hunter Rise: Sunbreak ha recuperado algo de lo Rise carecía; el reto.
Las cacerías en Monster Hunter Rise podían resolverse en menos de 15 minutos si eras un jugador experimentado. El juego simplificó tanto los sistemas que crear el equipamiento más eficaz contra un enemigo era relativamente sencillo. Este hecho, sumado a la poca vida y daño de los enemigos, convirtió a Monster Hunter Rise en una experiencia sencilla y monótona; una realidad que Sunbreak ha conseguido superar.
Los enfrentamientos del Rango Maestro en Monster Hunter Rise: Sunbreak han sido mejorados de una forma bastante inteligente. No solo han subido la vida y el daño que realizan los monstruos, sino que han añadido nuevos ataques a todos y cada uno de ellos. Estos nuevos ataques dan una nueva vida a ciertos monstruos básicos del juego, convirtiéndolos en una amenaza inesperada hasta para los cazadores más experimentados.
Por otro lado, los monstruos añadidos en Sunbreak constituyen un verdadero reto para todos los cazadores. Obviando alguna pequeña decepción como el Lunagaron, prácticamente todos los monstruos que vuelven o hacen su debut en esta expansión logran brindarnos combates simplemente espectaculares.
Otro añadido que merece reconocimiento son las llamadas “misiones de seguidor”. Estas misiones son un añadido a las típicas cacerías en las que uno o dos personajes de la historia nos acompañaran para derrotar a los monstruos. Las misiones de seguidor tienen dos ventajas principales: sirven para reducir la dificultad de los enfrentamientos para los jugadores que no puedan jugar online y nos dan un objeto que sirve para mejorar las armas frenesí.
Las misiones seguidor están perfectamente integradas en el juego, puesto que nos dan una menor cantidad de objetos del monstruo a cambio de reducir la dificultad de los encuentros. Otro dato importante referente a este tipo de misión es que los seguidores no pueden morir, reservando el placer de fallar la misión al cazador al mando.
Durante estas misiones podremos ver interacciones entre los seguidores e iremos sumando a más personajes conforme completemos sus encargos. Unos personajes que, además, cuentan con una inteligencia artificial bastante buena. Los seguidores son capaces de montar monstruos, colocar trampas y bombas, usar habilidades y utilizar objetos de soporte; facilitando todavía más la cacería y convirtiéndose en grandes aliados.
¿Alguien dijo endgame?
Sí, Monster Hunter Rise: Sunbreak incluye una forma de endgame que consigue dar algo más de vida al juego tras acabar con el enemigo final. La comunidad de Monster Hunter tuvo bastantes críticas y peticiones a Capcom pero, sin duda, las más sonada y repetida fue la necesidad de añadir objetivos al juego después de terminar la campaña principal. Capcom ha acabado escuchando las peticiones de sus jugadores y ha añadido en Sunbreak un tipo de monstruo nuevo llamado “bestia afligida”.
Las bestias afligidas nos esperan tras terminar la historia de Sunbreak. Este tipo de monstruo no es más que una bestia normal del juego con mucha más vida y algo más de daño; algo similar a los monstruos curtidos de Monster Hunter World. Al cazar a una bestia afligida nos recompensarán con materiales exclusivos que sirven para mejorar cualquier arma del juego a su máximo nivel.
Al completar estos encargos obtendremos también un ticket con el que podremos canjear armaduras superpuestas de Rango Maestro. Estas armaduras sirven para cambiar la apariencia de nuestro cazador sin trastocar las estadísticas y habilidades de nuestro equipamiento actual. Por lo general las armaduras superpuestas suelen añadirse como una actualización gratuita, pero en Sunbreak contaremos con la oportunidad de forjar este equipo al terminar la historia.
Las armaduras superpuestas y las bestias afligidas actualmente forman el endgame de Monster Hunter Rise: Sunbreak. Sinceramente, esta forma de extender la vida del juego es bastante pobre y acaba por agotarse rápido.
Al conseguir los materiales necesarios de las bestias afligidas no tendremos ningún motivo por el que volver a enfrentar a estos monstruos, puesto que no cuentan con equipamiento propio ni con ningún incentivo fuera de los materiales afligidos. Por tanto, estos enfrentamientos acaban realizándose más por el reto y por crear armaduras superpuestas que por mejorar nuestro equipo.
Es verdad que el endgame de Monster Hunter Rise: Sunbreak quizás tiene poca chicha, pero al menos cuenta con él (a diferencia de Monster Hunter Rise). Si bien las bestias afligidas no son las Tierras Destino de World, estas nos permiten mejorar cualquier arma del juego a rareza 10; un hecho que amplia enormemente la cantidad de builds que podremos crear. En definitiva, este endgame no es la solución perfecta al problema, pero es una solución que nos garantiza varias horas de juego.
Una expansión de notable alto
Monster Hunter Rise: Sunbreak es justo lo que necesitaba Monster Hunter Rise, es un más y mejor en toda regla y supone más horas de erradicación de plagas digitales con amigos. La expansión cumple con lo que promete: nuevas amenazas y nuevos retos que superar a martillazo limpio mientras nos batimos con bestias que miden más de dos metros.
Por si fuera poco, Monster Hunter Rise: Sunbreak cuenta con muchas de las mejores bestias de toda la saga, varios mapas completamente abiertos y el sistema de movimiento más fluido y ágil que podremos encontrar en cualquier Monster Hunter. El juego ha expandido todos sus sistemas, desde la personalización de nuestro cazador hasta sus opciones para eliminar a una bestia.
El ajuste de dificultad en los enfrentamientos y la adición de nuevos movimientos para los monstruos y cazadores ha conseguido que cazar en Sunbreak sea una experiencia más difícil sí, pero también más justa y gratificante. Este hecho, sumado a las bestias afligidas, las misiones de seguidor y el farmeo de adornos, logra que Monster Hunter Rise: Sunbreak se convierta en una expansión capaz de mantenernos durante cientos de horas cazando a nuestros monstruos favoritos.
Quizás Monster Hunter Rise no sea el título más redondo de la franquicia, pero con Sunbreak desde luego que se ha convertido en una de las entregas más recomendables; sobre todo si todavía no has jugado a ninguna entrega y estas buscando una buena puerta de acceso a la saga.
Monster Hunter Rise: Sunbreak está disponible para Nintendo Switch y PC. Nosotros hemos realizado este análisis jugando la versión de Nintendo Switch.