Dragon’s Dogma 2 mantendrá la consistencia narrativa con el juego anterior con la ausencia de la capacidad de nadar

En Dragon’s Dogma, la ausencia de la capacidad de nadar se convirtió en una peculiar característica del juego que se arraigó en el lore de la saga. Esta limitación, que inicialmente podría haberse percibido como una restricción técnica o una decisión de diseño, se explicó dentro del mundo del juego con una razón intrigante: permanecer en el agua durante demasiado tiempo atraía la atención del temible monstruo Piélago, quien capturaba al jugador para luego devolverlo a la orilla. Esta explicación, aunque inusual, añadió una capa adicional de inmersión al mundo de Dragon’s Dogma y se convirtió en parte integral de su identidad.

Ahora, con la anticipada llegada de Dragon’s Dogma 2, los aficionados se preguntan si esta característica se mantendrá en la secuela. Aunque aún hay muchos detalles del juego por descubrir, como su rendimiento exacto o el tamaño del mapa, la confirmación de que no se podrá nadar ha sido revelada por aquellos que han tenido la oportunidad de probar el juego. En la demo de TGS de Japan se pudo comprobar también.

Esta decisión, aunque no ha sido confirmada oficialmente por Capcom, ha generado opiniones encontradas en la comunidad. Algunos la ven como un gesto de respeto al lore establecido, demostrando que la compañía se toma en serio la coherencia narrativa de la saga. Sin embargo, otros creen que esta característica podría haber sido revisada o justificada de manera diferente en la secuela, especialmente considerando que Dragon’s Dogma 2 busca atraer tanto a nuevos jugadores como a los fanáticos del primer juego.